Museo Nacional, visita imprescindible en Varsovia

La semana pasada nos dimos un vuelta por el museo británico en Londres, esta semana seguimos con museos en la ciudad de mi último viaje, Varsovia. Cerca de la Nowy Swiat en Aleje Jerozolimskie un edificio de arquitectura de los años 20 que nada hace adivinar los tesoros que oculta en su interior. Se trata del Museo Nacional de Varsovia donde al igual que el British Museum se pueden objetos de civilizaciones antiguas pero además por lo que fue inicialmente construido para albergar obras de arte de la escuela flamenca y arte sacro.

Tuvimos la suerte de visitarlo antes de cerraran por reformas hasta la primavera del año que viene, así que para el próximo año es una visita imprescindible. Aunque a diferencia del British es un museo de pago, la entrada a la exposición permanente costaba 12 PLN (3€) y 17 PLN (4,24€) incluyendo las exposiciones temporales.

La exposición temporal en ese momento y terminaba el mismo día era sobra la pintura impresionista de Estonia acompañada también de fotografías. Se trata de obras de la primera mitad del siglo XX influenciados por otros pintores extranjeros del mismo estilo. No soy experta en arte, pero me gustó los colores y las formas de los cuadros. Me traje el libro de la exposición para mi padre y conseguí que por una vez me dijera que no conocía a los pintores. Es un libro en inglés y en polaco bastante grueso que me costó 78 PLN (20,35€). Una vez le traje un libro de Adolph Menzel de la Alte Nationalgalerie que yo no había oído jamas pues ya sabia quien era, desde entonces ese ha sido el reto.

Esa exposición se encontraba en la planta baja junto a las civilizaciones antiguas, Grecia, Roma con una parte importante dedicada a la anterior civilización etrusca, Mesopotamia y Egipto. En la parte egipcia llama la atención la colección de pergaminos que hay en una pequeña sala. También destaca una colección de joyas y monedas etruscas y cerámica griega.

Por su fuera poco en la planta superior esta la galería de arte con obras de Canaletto, pintores de la escuela flamenca y obras pictóricas de los siglos XVI a XIX. Pero también destaca un gran parte dedicada al arte sacro con retablos góticos y barrocos e iconos. Hay obras de grandes dimensiones y otras más pequeñas y al final del recorrido destaca un conjunto escultórico en madera de diferentes escenas de la vida de Jesucristo, la última cena, el vía crucis, la bajada de la cruz, etc.

Y no termina ahí, en el segundo piso están las galerías de artes decorativas que por falta de tiempo no vimos.

En definitiva se trata de un museo de corte clásico que no tiene nada que envidiar a otros museos famosos aunque haya que esperar a la próxima primavera para verlo.

En el próximo post visitaremos otro museo de Varsovia con un concepto completamente diferente, el Museo Chopin.

Hasta la próxima.