Después de recordar nuestro paso por el museo marítimo de Amsterdam, seguimos hablando del mar con una selección de los mejores lugares donde hemos visto el mar. Otros preferirán puestas de sol, amaneceres, paisajes, bosques, pero yo prefiero ver una enorme masa de agua perdiéndose en el infinito.
Esa parte del planeta que esconde un mundo paralelo lleno de vida, aunque navegar ni bucear estén entre las actividades que me gusta practicar, me gusta el mar y observarlo. Para mi es de las cosas más relajantes que existen, la sensación de paz y tranquilidad que te deja no se puede comparar con nada. Lamentablemente tengo la manía de viajar a ciudades sin mar, eso o en Europa la costa no es lugar para capitales ni ciudades destacadas, París, Berlín, Roma, Londres ni Amsterdam están al lado del mar, pero en cambio tienen ríos. Así que hacer esta selección me ha costado un poco y pero curiosamente todas son islas y buenos ejemplos de vistas al mar.
Empezamos por un buen ejemplo que tengo cerca de casa, una de las mejores vistas de la bahía de Palma se tiene desde enfrente de la Catedral o la Seo, uno de los puntos claves de la guía que hemos preparado para Labtrip Palma Señorial. Detrás de las antiguas murallas y arriba del Parc de la Mar, la conocida como calle Mirador (no podían haber elegido mejores nombres) se puede ver toda la bahía desde Porto Pi cerca de Marivent hasta la zona del Arenal y un poco más allá. Bahía por la que pasan veleros de todo tipo, yates, cruceros y los barcos que van a Ibiza, Maó, Barcelona o Valencia tanto de día como de noche. Aunque a veces esta vacía y sobre todo tranquila al no ser mar abierto.
Otra vista tranquila desde otra isla, pero no el mar Mediterráneo sino del océano Atlántico. En el norte de Irlanda del Norte en la isla de Irlanda, la impresionante costa de Antrim con su conocida Calzada del Gigante Giant’s Cuaseway que vimos en abril del año pasado. La Calzada del Gigante es un de las atracciones más visitadas del mundo, pero no es el único punto destacado de la costa de Antrim ni tampoco para ver el mar.
Existe una carretera llamada Causeway Coastal Route desde Belfast hasta Walled City en Londonderry son apenas 80 millas, unos 130 km, aunque la ruta hasta el Giant Causeway es más corta. De esa zona destacaría la vista del castillo de Dunluce y de la parte de Carrick-a-rede Rope Bridge, el puente de cuerda de donde es la foto. No tuve valor suficiente para cruzarlo, es un puente muy inestable para mi panico a los puentes y con el mar debajo menos, me gusta mucho el mar pero no para jugarme la templanza, así que preferí mirar la vista a cierta distancia.
Del océano Atlántico al Øresund que separa el mar Báltico del Mar del Norte y donde esta la isla de Selandia en la que se ubica la ciudad de Copenhague. Aunque el punto que recomendamos esta más al norte en Humlebaek, los jardines del Museo de Louisiana desde donde se puede ver incluso la costa de Suecia a lo lejos. Ese museo no podría estar en mejor lugar lo que es una razón más para visitarlo, aunque este a tres cuatros de hora en tren desde Copenhague.
Y terminamos con las islas Canarias en el océano Atlántico que por alguna curiosa razón, desde muchas partes es posible ver el mar. No se si por las construcciones o el relieve de la isla es muy fácil encontrarte el mar a cierta altura. Y a veces incluso ver también las otras islas, este es el caso de la Gomera que la costa sur de Tenerife llega a ser mas o menos visible, en este caso desde un mirador camino al Parque Nacional del Garajonay. Aunque no lo parezca la foto es de finales de diciembre y aunque hacia cierto fresco no llegaba a frío de invierno y además un poco más arriba ya en el parque con los bosques de laurisilva lloviznaba y había un poco de niebla y todo.
Y el último ejemplo del Puerto de la Cruz, en los demás lugares el mar estaba tranquilo pero en este ciudad del norte de Tenerife siempre esta en movimiento. Sobre todo en esta parte del paseo de San Telmo que raro seria si el mar no embatiera contra las rocas. Contrasta con el resto de imágenes por el movimiento del mar y el oleaje que tratándose un mundo aparte no debería ser ese su estado más natural? Aunque es igual de hermoso verlo quieto como un plato y contemplar toda su inmensidad que verlo chocar contra las rocas una y otra vez igual pero diferente.
O como dice la canción de Rosana Nadie Más que yo “océanos en calma se harán en noches largas, mar cálido, mar bravo, mar nuestro, mar salado, mareas en movimiento que en el peor momento, nos funda en un abrazo y sea el final del cuento que no hay amor perfecto sin ti…” Será un canción de amor pero ese protagonismo del mar la hace simplemente maravillosa y un colofón perfecto para esta selección de fotos.
Hasta la próxima.
