Después de descubrir el origen de The Monument en Londres, andaba un poco asustada a ver que me encontraría con el símbolo de la capital belga, el Manneken Pis o le petit Julien como también se le conoce. Por suerte su origen no parece estar relacionado con alguna catástrofe evitable, no esta muy claro pero que un bebé niño haga caso a la llamada de la naturaleza en esa forma tan habitual no tiene nada extraño. Supongo que siempre y cuando no apunte a tu cara, ahí debe perder todo la gracia me imagino.
¿Pero si es algo tan natural como es que se le dedica una estatua? Existen varias teorías al respecto, muchas relacionadas con guerras y el resultado de la acción o niños que se pierden y los encuentran en ese estado. Una de esas leyendas, la más antigua cuenta que se trata del duque Godofredo III de Lovaina que con solo dos años ya había heredado el ducado. Estaban en ese momento en guerra con otro noble y sus tropas le llevaron a una batalla.
En 1142 parece que no debía haber un oferta lúdica mejor para un bebé huérfano de 2 años y por lo visto las tropas necesitaban ánimos para la batalla. Así que metieron al niño en una cesta y la colgaron de un árbol, llegó un momento en que el niño no puedo aguantarse más y dejó bien mojados a las tropas enemigas, que se rindieron y huyeron del susto. ¿No dicen que esa substancia sirve para curar picaduras de medusas o granos?
La siguiente leyenda no tiene desperdicio tampoco, algo más tarde en el siglo XIV Bruselas estaba siendo atacada por una potencia extranjera que tenia la ciudad sitiada. Los atacantes habían puesto explosivos para dinamitar las murallas, pero un niño llamado Julien les descubrió y desbarató sus planes al más puro estilo Macgyver descargándose sobre la mecha encendida. Es un leyenda, que a nadie se le ocurra repetirlo.
Lo que se cuenta más habitualmente a los turistas, es la historia de un comerciante que perdió a su hijo pequeño en el centro de la ciudad, la ciudad se volcó en buscarlo y lo encontraron tranquilamente en un jardín en esa posición. El comerciante agradecido regaló una estatua a la ciudad para recordar ese hecho.
Existe una última teoría del niño perdido pero con una mamá pero de lo que si hay constancia histórica es de la existencia de una estatua en 1388 según los archivos de la catedral de Santa Gúdula que parece ser que fue robada en varias ocasiones. En 1619 el escultor Jerome Duquesnoy realizó la actual en bronce.
Actualmente la que se exhibe es una réplica ya que la original fue robada en 1960, lo que le dió la popularidad que tiene ahora. Cuando se recuperó la original fue llevada al Musée de la Ville de Bruselas donde se conserva con una colección de disfraces. Unas 36 veces al año le suelen colocar un traje relativo a una profesión o efemérides.
Ver como le ponen un disfraz es toda una experiencia, que de pura casualidad pude ver en mayo de 2012. Ahí estaban vistiéndolo de juez. Al lado de la estatua hay un pequeño tablón de anuncios que explica los disfraces del mes y como llegar al Musée de la Ville de Bruselas para ver el resto de disfraces.
