Aprovechando el TBMPoitiers en junio de 2019, terminanos nuestro viaje por la zona conociendo la capital de la Novelle Aquitaine, Burdeos. No estaba incluida en el programa de actividades igual que Chauvigny en nuestro caso, pero aprovechamos para dedicarle unos 3 días a esta ciudad francesa. En este caso igual que en Chavigny me acompañó Concha de Concha de Viaje, toda una experta en uno de los más destacados atractivos de esta ciudad, su tradición vinícola.
Cómo llegar a Burdeos
Desde España el mejor medio transporte sería el avión, con compañías como Ryanair, Iberia Express o Vueling que suelen tener buenos precios.
En mi caso lo hice en tren, porque veía de Poitiers aprovechando el servicio Low Cost del TGV, Ouigo. Desde 10€ por trayecto + 5€ por llevar equipaje de tamaño facturable en menos de 1h y media puedes ir de Poitiers a Burdeos. Existen más trayectos a ese precio por lo que se puede recorrer Francia por muy poco.
Dónde alojarse en Burdeos
Al visitar Burdeos durante sus fiestas principales, las de San Juan, nos costó bastante encontrar alojamiento ya que todo aparecia completo. Por las fechas del TBM ese año, la fecha de regreso nos coincidió con la fiesta. Por suerte abría un nuevo hostel en Burdeos, el Eklo Bordeaux Centre Bastide. Eklo es una cadena de hostels francesa muy comprometidos en el medio ambiente.
De hecho el hostel no había terminado su construcción y faltaban detalles para acabar. Pero las dos noches que estuvimos allí tuvimos una muy buena estancia y de una magnífico desayuno con productos naturales, hasta allí llevan la sostenibilidad. El desayuno cuesta 6€ que es el estándar de Burdeos, pero por la calidad que dan es realmente barato.
El precio por persona para dos noches en habitacion compartida de 6 salía por 45€ impuestos incluidos sin desayuno. Tienen diferentes tipos de habitaciones hasta privadas, pero todas tienen su propio baño o dos en el caso de las compartidas. También espacios para trabajar y una cocina.
El barrio en el que se encuentra Niel-La Bastille, es una zona en auge dentro de Burdeos, está bien conectada con buses y tranvía al centro. Hay un Carrefour market cerca y un restaurante de tapas españolas por si echaís de menos la comida.
Qué ver en Burdeos
Nada más llegar bajar del tren en Burdeos, fuimos a comprar la Bordeaux City pass que nos garantizaba transporte y entradas gratuitas a la mayoria de lugares de la ciudad. Por 39€ tenéis la tarjeta de 48h (cuenta por hora de activación) con transporte ilimitado y entradas a museos y atracciones como la Cité du Vin. Incluye ademas un visita guiada en autobús, tren turístico o a pie a elegir.
Entre los lugares que visitamos estaba el museo de Aquitania. El museo cuenta con una primera planta de arqueologica con restos romanos muy interesantes. Pero me gustó mucho más la segunda planta que hablaba de la historia del comercio y la esclavitud en Burdeos. La exposición se complentaba con una maqueta a tamaño real de una tienda de ultramarinos, una epicierie. Algo que se puede ver en muchas calles y avenidas de la ciudad, todavía existen este tipo de tiendas con productos traídos de todas partes del mundo.
También vimos la catedral, la Grosse Cloche (la gran campana), y la torre de Cailhau y otras iglesias como Sant Eloi, Sant Pierre y Notre Dame. Muchas romanicas como las de Burdeos.
Además aprovechamos la entrada gratuita a la cité du Vin antes de las 12 de la mañana. La cité du Vin es una gran edificio vanguardista un poco alejado del metro, pero accesible en metro con parada propia. Dentro se puede ver una moderna exposición con todo lo relacionado con el vino, desde su producción e origien. Hay para entretenerse un buen rato y tomarse un vino de aperitivo con la degustación gratuita que incluye la entrada. Para los menos bebedores de vino, tienen vinos dulces y mosto para degustar.
Esa visita la complementamos a parte con un Freetour del Vino de Civitatis, nos lo hizo una guia encantadora llamada Jackie que nos mostró el barrio de Chartorns con el objetivo de hacernos sentir marchantes de vino por unas horas. La visita termina con una cata opcional de 5€.
Algo que también disfrutamos de hacer fue pasear por el barrio de Niel La Bastille, dónde se encontraba nuestro hotel al otro lado del río Garona que se encuentra en pleno desarrollo. Las zonas más céntricas como la plaza Quinonces dónde se celebrabran las fiestas de San Juan cuentan con edificios impresionantes como el gran teatro de Burdeos.
Y para acabar tengo que reconocer que se me pasó lo más importante, el mirror de l’eau, el espejo del agua al lado del río que refleja los edificios de la place de la Bourse. Mira que me intenté fijar cuando pasaba por allí pero no vi nada. En Ginebra con el Jet d’Eau me pasó lo mismo. No sé si ese no funcionaba tampoco pero realmente no lo vi. Pero bueno así tenemos excusa para volver y estar algo más que 3 días en Burdeos
