Belfast, la capital de Irlanda del Norte es la segunda ciudad de la isla de Irlanda, es tristemente conocida por ser uno de los escenarios del conflicto de Irlanda del Norte. Lo que se considera además uno de sus principales atractivos turísticos, los murales de Sandy Row o un tour en blackcab por las zonas del conflicto no deben faltar en una visita a la ciudad. Pero más allá de su triste pasado reciente, la ciudad ofrece muchos más lugares que conocer y actividades para realizar.
En primer lugar Belfast, ha sido siempre una ciudad próspera gracias a su pasado industrial, básicamente en las ramas aeronáutica y naval. Sobre todo en la construcción de barcos de sus astilleros Harland and Wolff salieron barcos como el Titanic. Este año se ha conmemorado el centenario de su entrega concretamente el 31 de mayo de 1911. Para celebrarlo se han realizado conferencias y exposiciones y para el próximo año también hay previstas más actividades ya que el 15 de abril se cumplen 100 años de su hundimiento. Esta previsto inaugurar para esas fechas un nuevo centro de visitantes con las ultimas tecnologías en los astilleros que fue construido. Esa zona se encuentra bastante alejada del centro.
Pero un hecho importante que marcó Belfast fue que la reina Victoria le otorgara el status de ciudad en 1888. Esto provocó una gran transformación urbanística y social. De esa época destaca la construcción de su ayuntamiento, el Belfast City Hall iniciada en 1898 y terminada en 1906. Ubicado en Donegall Square y construido en estilo neobarroco con una cúpula central al estilo de la catedral de Sant Paul en Londres. Su interior con sus salas y gran escalera no defraudan. De lunes a sábado se organizan visitas guiadas gratuitas en inglés para conocer la historia y su funcionamiento actual. No hay que perderse su jardín lleno de monumentos, en recuerdo a las víctimas de Belfast del Titanic y de las guerras mundiales.
Otra señal de la influencia de la reina Victoria, el torre del reloj dedicada al que era su esposo, el Albert Clock Memorial uno de los iconos de la ciudad. Construido en estilo neogótico en 1865 en Victoria Street cerca del rio Lagan.
En concreto de la segunda guerra mundial, se puede visitar cerca de la Catedral de St Ann, el Northern Ireland War Memorial en Talbot Street. Con entrada gratuita hace un repaso a los hechos históricos más importantes ocurridos en la ciudad durante ese periodo, bombardeos, la vida en el frente y en la ciudad. El lugar es además un importante lugar de archivo y documentación donde acudir en búsqueda de información.
Aunque para conocer el pasado de la ciudad, una buena manera es pasear por centro histórico con una de las visitas guiadas que salen de la oficina de turismo en Donegall Place, 47. Entre ellos el Historic Belfast Walking Tour que se realiza los fines de semana a las 2 de la tarde durante una hora y media en inglés por 6 libras.
Otra manera de descubrir el pasado de la ciudad es el Ulster Museum, historia, arte y ciencia con entrada gratuita. Dentro de uno de los lugares imprescindibles de visitar en Belfast, los Botanic Gardens. Gran parque de la ciudad con toda clase de plantas y arboles con dos grandes invernaderos, The Tropical Ravine y The Palm House. Con horario más restringido que el parque, pero igualmente con entrada gratuita.
Al pasear por los Botanic Gardens no debéis perderos, las facultades de la Queen’s University en la misma zona, como el edificio en piedra escocesa de la escuela de Música. Por supuesto Belfast es también un fantástico lugar para ir de compras, existen muchas calles y centros comerciales. Como Victoria Square a punto de cumplir su primer año, en cuatro plantas reúne tiendas y restaurantes y desde su terraza se puede hacer una panorámica de la ciudad. .
Si se dispone de tiempo, es recomendable hacer una excursión al Giant’s Causeway. Maravilla natural en la costa de Antrim, patrimonio de la humanidad por la Unesco. Se trata de la tercera atracción de este tipo más visitada del mundo. Erupciones volcánicas han dado forma a piedras octogonales dando forma a lo que parece ser un camino que se adentra en el mar lo que ha dado lugar a muchas leyendas. Cerca de allí se encuentra el Carrick-a-rede, puente de cuerda tendido entre dos peñones sobre el mar que se puede cruzar por 5 libras. Aunque otra manera de terminar la excursión con un poco menos de riesgo, seria con una visita al Old Bushmills Distillery, se trata de la destilería de whisky con licencia más antigua que sigue en funcionamiento. Se ofrecen visitas guiadas para conocer su historia y el proceso de elaboración o simplemente hacer una parada en su tienda y adquirir unas botellas de su peculiar whisky.
Como llegar
La ciudad cuenta con dos aeropuertos, Belfast City Airport y Belfast Internacional Airport. La mayoría de vuelos llegan al aeropuerto internacional y ambos tienen un servicio de bus hasta Great Victoria Station. Al ser Belfast parte del Reino Unido existe control de documentación, si bien con el DNI en vigor es suficiente a la llegada.
Otra opción es llegar desde Dublín en tren, el trayecto dura 2 horas aproximadamente con un coste de 20€. Existen varias frecuencias al día desde la estación Dublin Conolly hasta Belfast Central. Contrariamente, que en los aeropuertos, aunque se trate de países diferentes no existe control de pasaportes.
Más información
Página en inglés de Turismo de Belfast (existe un pdf con información en español)
Belfast Internacional Airport Aeropuerto Internacional de Belfast
Este post fue publicado originalmente en el antiguo Blog de Tourist Eye en noviembre de 2011, al no ser accesible en esa ubicación hemos dedicido recuperar el texto y añadirlo al blog.
